Esta página ofrece artículos y comunicaciones de Marcus André Vieira sobre temas psicoanalíticos, a partir de una lectura lacaniana.
Total de 24 textos.
La teorización lacaniana del “semblante”, o apariencia [semblant] en relación con el teatro de los sexos. Puede leerse como una reanudación clínica más directa del tema esbozado en un plan más general en “Sexo cortés”.
Innovadora manera de pensar la interpretación lacaniana como apuntando a la resonancia de la voz, en el cuerpo, vía para atrapar lo indecible y lo intraducible. Inventando ideas como la “transcreación de lo imposible”, con la lucidez y la buena pluma de siempre y tomando a quien pueda tildarse del Joyce de la literatura brasilera –Guimarães Rosa–, Marcus André Vieira resitúa la resonancia y la introducción para pensar mejor el fin del análisis.
Estamos en medio de una clínica de psicosis, pero vamos a concluir en la línea de un famoso título de E. Laurent: “Lo que las psicosis enseñan a la clínica de neurosis”. Quizás podamos preguntarnos hoy: “¿Qué enseñan las invenciones esquizofrénicas sobre el tema de la invención en general?”. Y más, “¿Pueden las invenciones de la psicosis contribuir a descifrar la política de hoy, cuando el Otro es inconsistente como el del esquizofrénico?
Imperio neuro ¿Qué entiendo con esta expresión?
¿Sería posible forjarse un lugar en el Otro que se sostenga y que pueda reconocerse incluso fuera del sentido? Este texto discute las posibilidades ante el vaciamiento de la idea de Otro social estable y la presencia cada vez más fuerte de Otras formas de enlace, gancho, lazo, de ça tient.
El sinthome se reitera en un barrio no rígido. No es un régimen de alteridad consecuente, sino de lo que se siente. Tienes que moverte para quedarte allí. No es necesariamente moverse en la ciudad, aunque nuestra política lo exija cada vez más. Puede ser dejarse conmover por una luciérnaga, un discurso, un olor. Es dejarse sorprender
Comentario de El pase, antes del pase… y después: finales de análisis, de Irene Kuperwajs.
Estamos acostumbrados a hablar de lo real como de una entidad compacta, lo real. Nuestro congreso, además, asume que el desorden en lo simbólico lleva a un modo de presentación de lo real a tal punto modificado que podemos hablar en un real – un real para el siglo 21 que no sería más el del siglo 20. Pero ¿hasta qué punto podemos declinar lo real? ¿Habría tantos reales cuanto discursos? ¿Sujetos?
En su texto usted destaca que hoy los semblantes, incluso el falo y el Nombre del Padre, se desnaturalizan y que todos los semblantes –a la altura de todo el mundo es loco– son defensas frente a lo real. Sin embargo, aclara que hoy hay que ser más atentos y respetuosos que nunca con los semblantes. Se pregunta ¿con qué brújula tocar un semblante? Y llega a la conclusión de la importancia de que tanto diagnóstico como interpretación toquen, además de los significados, lo que no puede decirse, nombrándolo. Quisiéramos conversar acerca de estos puntos, la importancia de respetar los semblantes hoy y esta brújula de nombrar lo que no está dicho ni significado para “hacer un agujero”.
El tema de nuestra revista es la imagen, el brillo que promete y los efectos de esa promesa en los sujetos de la época, efectos variables que intentamos relevar en la clínica, investigarlos y extraer eso que nos resulte valioso a los psicoanalistas
Cómo pensar el lugar del cuerpo en la práctica analítica en los tiempos actuales?
Respuestas a Eva-Lilith por Marcus André Vieira.
Decimos aquí caída de la función, como decimos otras veces en nuestro campo, la caída del Nombre-del-padre, o del falo como una premisa universal. Esta caída da lugar a todo un inventario de cuestiones, por ejemplo: ¿Qué quiere decir exactamente una caída? ¿De qué? ¿Del falocentrismo? ¿Del falo? ¿De la función fálica? ¿Los llamados “nuevos síntomas” hasta qué punto son tributarios de esta caída?
Asumimos que la devastación es índice de una posición, de una forma de ser en relación al disfrute del cuerpo. En otras palabras, la devastación “no ocurre sin” el Otro. Pero ¿qué es el Otro de la devastación?
En términos de Lacan, nuestros días parecen vivir en lo imaginario “como si” lo simbólico no existiera. Es el mundo de las imágenes tomadas como lo real en sí, como si eso fuese posible, como si ellas no nos fueran presentadas dentro de un enredo, por mínimo que sea, que oriente su aprehensión.
El texto presenta algunas de las preguntas que nos plantea, a los analistas, el debate en curso en la cultura en relación a la explosión de los géneros. Sentimos cuánto nos encontramos ante una catalogación inestable y en proliferación descontrolada, pero ¿cómo abordarla clínicamente?
Es el espacio de la extrañeza y sus objetos lo que cuenta. Para ello no basta con buscar el fuera de campo, sino el punto en el que la escena tiembla, la desrealización de la escena. Es una desrealización particular la que nos interesa. Sin embargo, cuando todo lo que se resiste a ser definido a la manera de “pan-pan, queso-queso” se convierte en enemigo y hay que destruirlo o masa que hay que eliminar, ¿cómo podemos seguir siendo irónicos difusores de extrañeza, carroñeros de objetos extraños?
¿Cuál es el objeto del psicoanálisis y cuál es su naturaleza tan particular que no se incluye en la ciencia estándar? Este texto aborda la relación entre Psicoanálisis y Ciencia, a partir de una lectura lacaniana.
El incurable del narcicismo
Este texto retoma y reorganiza pasajes de los autores del libro Madres
Consumista, loca, pero también creativa y emprendedora; no nos hacen falta figuras de lo que sería lo típicamente femenino. Asumimos con Lacan, sin embargo, que la mujer no existe en el sentido de que su ser no tiene esencia, no se inserta en el campo de la representación. ¿Cómo se articulan, entonces, lo femenino en Freud y Lacan y las imágenes de lo femenino en la cultura?
El título del V Encuentro Americano del Campo Freudiano (ENAPOL): “La salud para todos no sin la locura de cada uno” propone una articulación peculiar entre universal y singular, definida por la expresión “no sin”. Me gustaría explorar el modo de relación que esa expresión introduce.
Notas sobre el diagnóstico
Presentación del X Congreso de la Asociación Mundial del Psicoanálisis en que se abordó el inconsciente a partir de la expresión El cuerpo hablante.
Sobre el efecto de lo que Lacan llamó “pulsión invocante”. Es una experiencia de certeza. Somos intimados, incluso aunque no se sepa bien ni por quién ni para qué. Fue en relación a esa exigencia ciega y sin cuerpo que el análisis permitió una modulación, una pequeña separación que cambió mi historia.
Orkut y Facebook como paradigmas de la personalización sintomática de nuestro tiempo: a cada uno sus modos de goce (su síntoma). Este texto retoma parte del curso: La política del síntoma.